De las regiones cálidas del Ecuador (Valles tropicales y subtropicales) se cultiva la naranja en plantaciones de agricultores en la mayoría de los casos asociadas a otros cultivos tropicales. Cada año la producción inicia por el mes de septiembre y finaliza por noviembre, siendo sus características un fruto jugoso, y de sabor ácido, la dulzura está asociada a la época de producción.

Para su elaboración se ha puesto especial atención en la materia prima, pues las naranjas provienen de zonas por tradición dedicadas al cultivo de esta fruta. El contenido de una botella de vino de naranja está en su totalidad formado por jugo de naranja, que luego de un proceso minucioso el mosto de naranja se transforma en vino, para lograr el color característico en el vino fue necesario mantener en reposo durante 1 año luego de la fermentación, y tras repetidos trasiegos se logra clarificar el vino sin el uso de productos químicos. Esto permite incrementar su aroma y color característico.